Los miembros puedan necesitar consejo profesional más que ropa. Los miembros referidos por su obispo [a LDS Family Services] no deben dudar en pedir ayuda de este tipo como no dudarían al pedir ayuda de otro programa de bienestar del sacerdocio. (Harold B. Lee, Seminar for Regional Representatives of the Twelve [Seminario para Representantes Regionales], 1 de octubre de 1970; J. Richard Clarke, "Ministering to Needs through LDS Social Services [Cómo utilizar los Servicios Sociales SUD para satisfacer las necesidades temporales]", Ensign, mayo de 1977, pág. 85)
Un consejo dado como limosna emocional, puede ser tan destructivo a los principios de autodependencia como la limosna material. (Boyd K. Packer, "Self-Reliance [La autosuficiencia], Ensign, agosto de 1975, pp. 85-89)
Se insta a los líderes del sacerdocio y de organizaciones auxiliares a renovar sus esfuerzos de enseñar a los miembros del barrio y de la estaca la importancia de vivir vidas castas y virtuosas. Alarmados nos hemos percatado del continuo deterioro de los valores morales en la sociedad y del resultante número de hijos que crecen con padres solteros.
Un niño necesita tanto a un padre como a una madre que le suministren amor, apoyo y las bendiciones del Evangelio. Se deben hacer muchos esfuerzos para ayudar a los que conciben sin estar casados, a establecer una relación de familia eterna.
Cuando los padres solteros no pueden o no están dispuestos a casarse, deben ser animados a colocar al niño para adopción, preferiblemente con Servicios para la familia SUD. Los padres solteros que no se casen no deben ser aconsejados a quedarse con el niño como condición del arrepentimiento ni como una obligación de cuidar de si mismos. El dar a un hijo en adopción a través de Servicios para la familia SUD ayuda a asegurarse que el bebé será criado entre familias fieles Santos de los Últimos Días y que recibirá las bendiciones sagradas de los convenios selladores. A los padres solteros que no se casan no se les debe aconsejar a quedarse con los infantes como una condición de arrepentimiento o no asumir su obligación de cuidar por los suyos propios. Por lo general, los padres solteros no pueden proveer el ambiente estable y nutricional tan esencial para el bienestar del bebé. Cuando decidan dar al bebé en adopción, la consideración primordial debe ser, lo que sea mejor para el bebé. Tal decisión debe permitir al padre soltero hacer lo que es mejor para el niño y realzar al prospecto para las bendiciones del Evangelio en las vidas de todos los involucrados (Ezra Taft Benson, Gordon B. Hinckley, Thomas S. Monson)
Además, hay otras cosas que quizás no sean tan obvias y que también deben abandonarse para disfrutar al máximo la felicidad de ser miembro de Su reino. El presidente Hunter lo explicó de esta manera: "Quisiera decirles algo que considero muy importante: en el transcurso de la vida enfrentarán muchas opciones. Su éxito y felicidad dependen de lo bien que seleccionen entre esas posibilidades. Algunas de las decisiones que tomen serán fundamentales y pueden afectar todo el curso de su vida. Les ruego que juzguen esas opciones de acuerdo con las enseñanzas de Jesucristo". A fin de hacerlo, deben conocer y entender Sus enseñanzas. Si ejercen la fe y son dignos de recibir inspiración, tendrán guía en las decisiones importantes que tomen. . . . El presidente Hunter añadió: "Les sugiero que den un lugar de prioridad absoluta a su condición de miembros de la Iglesia de Jesucristo. Juzguen cualquier cosa que les pidan que hagan, provenga ello de sus familiares u otros seres queridos, de su patrimonio cultural o de las tradiciones que hayan heredado; júzguenlo todo según las enseñanzas del Salvador. Si algo no va de acuerdo con esas enseñanzas, pongan el asunto a un lado y no persistan en él. No les traerá felicidad" ("Counsel to Students and Faculty [Consejos a los estudiantes y a la facultad]", Church College of New Zealand [Colegio de la Iglesia de Nueva Zelandia] , 12 de noviembre de 1990; Richard G. Scott, "Cómo eliminar las barreras que nos separan de la felicidad", Liahona, abril de 1998)